Mascotas

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ENERO, 2018

Después de un tiempecito (coincidente con navidades, oh, casualidad) sin actualizar el blog, os cuento en qué he andado metido en estos días de asueto: fotografiando familias. Así, sin más preámbulo. Familias y sus perros, además. Han sido un montón de sesiones a cual más divertida, en un “sector” en el que espero seguir desarrollándome en los próximos meses. Os cuento algunas de ellas.

 

Xayi e Iván estuvieron por el estudio una (todavía) no muy fría tarde noche. Vinieron con Calcetines y Tonelete, sus dos mestizos (de Border Collie y quién sabe qué más) adoptados. Sus dos preciosos mestizos adoptados, para ser exactos. Entre risas y salchichas, el tiempo pasó volando. Y alguna foto pudimos hacer. Francamente difícil para mí elegir entre tanta mirada limpia e inteligente. Al final, termina siendo más fácil hacer las fotos que seleccionar luego entre ellas. Eso es bueno, ¡aunque no lo parezca!

Otra tarde se pasaron por el estudio Elena y Nacho con sus galgos, también adoptados, Bombo y Nuca. Los acompañaba a los cuatro, Laia, otra galguita que tenían en ese momento acogida, esperando una familia de adopción. Se portaron muy bien, los humanos también, jejeje, así que fue todo muy muy fácil. Por aquí abajo podéis ver una parte del resultado. Otra vez complicado elegir entre las de ese señor buenazo, Bombo, esa dulce Nuca o la tímida Laia. Bendita dificultad.

 

El 22 de diciembre por la mañana, mientras los niños de San Ildefonso cantaban eso tan taladrante de los mil euros, Cristina se vino a Big One Studio con Nemo y Noa. Dos maravillosos perros de aguas, también adoptados. Con ellos vino también Ana y su Golden, Chencho. Nemo y Noa son dos adorables torbellinos, tanto como dulce y tranquilo puede ser Chencho. La combinación de los tres carácteres con la simpatía y amabilidad de sus dueñas, hizo de esa mañana un premio mejor que lo que pudieran estar cantando los huérfanos esos. Creo sinceramente que se nota en las fotos.

En breve podréis ver sección en la web de este tipo de fotos. Mientras tanto, animaos. Si tenéis un animal en casa, retratadlo. Mucho. Y si queréis que esos retratos sean en un estudio, con una iluminación y un proceso personalizado y preparado exprofeso para ti y para ellos, contacta. Verás cómo nos ponemos de acuerdo, no me cabe duda alguna.